Brasilia, 16 jul (PL) La presidenta Dilma Rousseff afirmó hoy que la construcción de 900 nuevas Unidades de Pronta Atención (UPAs) hasta 2014 permitirá mejorar los servicios sanitarios a los brasileños y con ello elevar el bienestar de la población.

«Nuestro gran desafío es garantizar que esa atención sea de calidad para todos. Y cuando digo atención, significa tener médicos disponibles y tener una atención humana y respetuosa», apuntó Rousseff en su habitual programa radial de los lunes Café con la presidenta.

La mandataria anunció la inversión de dos mil 700 millones de reales, unos mil 350 millones de dólares, para la construcción de esas 900 UPAs, e indicó que ellas se unirán a las 200 que ya funcionan en todo el país y que en conjunto reciben unos dos millones de pacientes al mes.

Pero, precisó, sabemos que el reto es inmenso, pues casi 140 millones, de los 191 millones de habitantes del país, dependen exclusivamente del Sistema Único de Salud, al cual están adscritas las UPAs, los hospitales públicos y las Unidades Básicas de Salud.

En ese engranaje, Rousseff explicó que las UPAs fueron creadas para dar antención rápida a quien está con un problema urgente de salud, desde una fiebre, una fractura de un brazo, un accidente de tránsito hasta un infarto. Para ello, esas unidades poseen los profesionales y los equipos médicos necesarios.

Ahora, prosiguió, si el caso fuera más grave, el paciente recibe el socorro emergente en esa instalación y después es trasladado a un hospital público. Pero, resaltó, el 97 por ciento de los casos son resueltos en esos locales de pronta atención sanitaria.

Ya para dar seguimiento a los pacientes, la presidenta refirió que existen las Unidades Básicas de Salud, y para que el sistema funcione bien cada servicio debe complementar al otro, aseveró.

Por eso, adelantó, además de la inversión para la construcción de las 900 UPAs, vamos a destinar tres mil 500 millones de reales, unos mil 750 millones de dólares, para edificar y equipar cuatro mil nuevas Unidades Básicas de Salud, así como para reformar y ampliar otras 21 mil en todo el país.

«Me preocupo y trabajo mucho para hacer Brasil crecer y desarrollarse, pero es preciso cuidar especialmente del desarrollo de las personas, poque un país solo se desarrollo de verdad si mejora la vida de las personas», subrayó la mandataria.