Juan Gossain y Ernesto McCausland en una de las tertulias en el diario El Heraldo.

Así expresó sus sentimientos, el periodista Juan Gossaín ante la muerte del cronista barranquillero, Ernesto McCausland, editor general de EL HERALDO, ocurrida este miércoles, en la madrugada.
“Si en el cielo hay medios de comunicación y no digo periódico Tico debe estar feliz; era hombre de radio, de televisión, de periódico, de cine, en los últimos años dedicado a sus películas”, dijo Gossaín en entrevista con Emisora Atlántico.

“De una cosa estoy seguro, Jorge Cura, que contra Tico McCausland la muerte no va a ganar, no va a ganar por una razón porque la única muerte verdadera es el olvido. ¿Quién va a olvidar a Tico McCausland?, no mas hoy, el día de su muerte, todos los compañeros, los medios de comunicación le están rindiendo el homenaje que se merece, el homenaje de su vida, el de su obra”,

“Mientras quede una huella del paso de Tico sobre la tierra, no habrá olvido”: Juan Gossaín

Todo lo hacía bien

“Esta mañana cuando comenzamos a hablar de Ernesto, dijimos que en lo que se metía lo hacía bien, hablamos de radio, trabajó con nosotros en Emisora Atlántico, luego estuvo en Caracol , hablamos de televisión y cine para dejar la prensa de último porque era el medio que manejaba de la manera más fantástica porque las crónicas de McCausland son algo que, absolutamente, nadie podrá olvidar, le comentó Jorge Cura a Juan Gossain.

“Estamos totalmente de acuerdo- agregó Gossain- y tenían una virtud enorme, además del talento y la capacidad, no le quedaba región donde no estuviera en el Caribe colombiano, uno se encontraba a Ernesto en un pueblo, en una ciudad, en el mercado de Barranquilla, a la orilla de un río por allá en el Cesar, en Magdalena, a los tres días en la plaza de mercado de Sincelejo; el Caribe era su ámbito y lo descubrió a través de la crónica, descubrió que el periodismo es la gente, de eso se trata”.

Juan Gossain dijo que no vendrá a Barranquilla al sepelio de Ernesto McCausland porque “yo nunca voy a los entierros de las personas que quiero. Jamás. No le doy ese gusto a la muerte, yo prefiero recordara a mis seres queridos, a mis amigos como a Ernesto prefiero recordarlos como eran en vida, una sonrisa, una broma el día menos pensado y no ir a ese triste espectáculo que es la muerte, no fui ni siquiera al entierro de mi padre porque eso es reconocer el triunfo de la muerte y en personas como Ernesto McCausland la muerte no triunfa nunca; contra personas como McCausland la muerte no puede tender un manto de olvido, eso no va a ocurrir. Entonces para que darle ese gusto a la muerte, yo no voy”.

Reacciones

Juan Manuel Santos

En su cuenta de Twitter, el presidente de la República, Juan Manuel Santos @JuanManSantos publicó el siguiente mensaje: Acompañamos de todo corazón a la familia de Ernesto McCausland y a todos sus compañeros periodistas. Una gran pérdida.

Gustavo Bell Lemus

Ernesto tenía el ojo de un niño curioso que se asombra por las pequeñas cosas, por los detalles de la vida que para la gran mayoría son intrascendentes, pero su mirada y su pluma los hacía únicos, valiosos. Pero ese don no era gratuito, ni congénito, era el fruto de una disciplina de estudio, de incansables lecturas de los clásicos de la literatura como de los grandes cronistas del periodismo contemporáneo.

José A. Segebre

La vida de McCausland es un ejemplo para las presentes y futuras generaciones de colombianos, porque además de sus altas calidades profesionales se destacó por su don de gentes y el compromiso con el desarrollo del Atlántico, el Caribe y el país. Es una gran pérdida para el periodismo, no solamente de Colombia, sino del mundo, porque gracias a sus crónicas pudimos disfrutar de historias bien contadas.

Elsa Noguera de la Espriella

Ernesto McCausland nos enseñó a amar a Barranquilla. Dejó su huella inmortal en esta esquina del mar Caribe y el Río Magdalena. La Alcaldía de Barranquilla manifiesta su sentimiento de pesar y condolencias a la familia de Ernesto y a sus compañeros del periódico EL HERALDO, medio que fue su casa periodística. Se nos va un gran ser humano y talento barranquillero.

Érika Fontalvo

Él estaba feliz como editor de EL HERALDO, ilusionado con esa posibilidad de convertir a EL HERALDO en lo que es hoy: un periódico de referencia importantísima de la Costa en todo el país, y era feliz enseñando a los ‘pelaos’. Vivió como quiso, en su cheveridad, en su bacanería, le dijo un día adiós a ‘cachaquilandia’ y se volvió a su Caribe, a disfrutar de lo que tanto extrañamos los costeños en la ‘nevera’.

Alberto Salcedo R.

Cuando llega la muerte, viene el duelo y después del duelo viene la celebración. A Ernesto hay que celebrarlo, por varias razones: una, su gran calidad narrativa, que se hizo evidente especialmente en la crónica. Sus crónicas de Mundo Costeño hablan de una pasión visceral que tuvo todo el tiempo por el periodismo que no solamente llevara noticias de la actualidad sino que tratara de descifrar el alma de los personajes.

Daniel Samper Ospina

Sin duda alguna es uno de los mejores cronistas tanto de TV como de prensa escrita que ha tenido Colombia en toda su historia. Tuve el privilegio de haber publicado sus crónicas, que fueron de lo mejor que ha sacado Soho. Y como amigo, creo que su legado es insuperable, era un tipo con tanto talento como sencillez, lleno de una calidez humana muy pocas veces vista, una nobleza, una bondad y un sentido de la amistad excepcionales.

Gustavo Gómez

Ernesto fue un tipo enorme. Sobre todo para gorditos bajitos como yo. Además de la gracia y el estilo, de sus años conmigo en Caracol Radio hay un recuerdo que no se me borra: tenía docenas de casetes, esos adminículos que son para los jóvenes de hoy tan exóticos como Kuala Lumpur para mí. Los manejaba con destreza, porque en ellos conservaba audios que para él eran un tesoro, que sabía compartir con los oyentes.

EL HERALDO