develan_replica_de_la_custodia_de_badillo_2La obra fue situada a un costado de la capilla de San Antonio, donde ocurrieron los hechos que dieron origen a ‘La custodia de Badillo’, la célebre canción de Escalona.
Tiene 3.20 de altura y está recubierta en laminilla de oro.

Hace 57 años que Rafael Escalona compuso el famoso paseo a la desaparecida custodia de Badillo y aún la leyenda sigue viva. El martes en la noche el pueblo recibió una escultura de la custodia, de tres metros veinte centímetros de altura y un diámetro de un metro con noventa centímetros.

La obra, elaborada en bronce y recubierta con laminilla dorada, fue elaborada  por el artista Jorge Maestre. “Hice un diseño en computador que le  gustó al Gobernador. Hice mi investigación sobre las custodias. Eran de oro macizo, decoradas con centenares de joyas, topacios, esmeraldas, amatistas, zafiros, diamantes y demás”, explica el artista.

“Si el maestro Escalona estuviera vivo se hubiera emocionado al ver que Badillo recuperó su custodia”,  cuenta Carmen Díaz, celadora de la capilla de San Antonio, donde ocurrieron los hechos que dieron origen a la célebre canción.

El artista basó su diseño en la custodia que tienen las clarisas en Bogotá, que pesa 4 kilos en oro y tiene 750 esmeraldas. “Eran obras hechas por joyeros especializados que vinieron de España y, en el caso de la custodia de las clarisas, el joyero duró tres años haciendo dos custodias, la de las clarisas y la de la Catedral Primada de Bogotá”, cuenta Maestre quien investigó que las custodias fueron concebidas para evangelizar a los indígenas durante la conquista española. “Cuando los españoles llegaron a América encontraron que los indios veneraban el sol,  la luna y la naturaleza, y por ello las custodias nacen en América con el fin de representar al sol, que era la divinidad que ellos adoraban”. Para el historiador Tomás Darío Gutiérrez “Badillo es importante por la realidad histórica y por el mito cantado por el maestro Escalona. Esa custodia simboliza la grandeza histórica de este lugar. Badillo fue la puerta de entrada de la Conquista. Aquí llegó el primer conquistador Pedro de Badillo, en 1528, de allí su nombre, y fue la primera expedición conquistadora, pero más importante es el cuento de la custodia magnificado por el maestro Escalona”.

La custodia quedó erigida frente a la iglesia de la población y brilla desde lejos en la recién inaugurada plaza. “Queremos que Badillo se convierta en otros de los municipios turísticos del Cesar,  que el visitante pueda venir a conocer”, dijo el gobernador del Cesar Luis Alberto Monsalvo al entregar la obra.

POR: LINA ROBLES LUJÁN – ENVIADA ESPECIAL/EL HERALDO