Bogotá, 5 ene (PL) Ligada a la cultura cafetalera, la feria de Manizales atrae hoy a miles de turistas colombianos y foráneos, interesados en disfrutar de sus tradiciones agrarias y artísticas, entre cabalgatas, conciertos, temporadas taurinas y espectáculos danzarios.
Desde el 2 de enero y hasta el domingo, los lugareños reverenciarán sus raíces y costumbres ancestrales, asociadas al cultivo del café en las inmediaciones de la cordillera andina.
En el corazón del eje cafetero, chapoleras o recolectoras junto a otros personajes típicos hacen gala de sus habilidades y agradecen a la naturaleza por los frutos concedidos, entre deslumbrantes paisajes.
La feria del campo es uno de los eventos más esperados, además de las exposiciones de artesanías, demostraciones circenses, exhibiciones cinematográficas, desfiles, recitales de hip hop, juegos de fútbol y competencias ciclísticas.
En tanto la banda municipal de Manizales, capital de Caldas, interpreta en pleno parque emblemáticas piezas de pasodoble.
Además de saborear el café de esa demarcación, próxima al volcán Nevado del Ruiz, los participantes degustan platos de la gastronomía local, a base de frutos, y otras recetas con influencia de las costumbres paisas, particularmente antioqueñas.
Fundada en 1849 la urbe fue reconocida después como el asentamiento cafetero más importante del país.
En Caldas crece la variedad suave o arábiga, de prestigio mundial.
Por estas fechas la también llamada ciudad de las puertas abiertas luce su mejor cara, al transformarse en uno de los lugares más acogedores y alegres de Colombia, con un pasado indígena y español.
Tras las celebraciones de fin de año continúa la fiesta al ritmo del pasodoble, tan arraigado en esa región como la predilección por el toreo.
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