Rosendo Romero
Estimado Félix: Nos dejaste una tarea para resolver y te aseguro que nosotros ya esa tarea la resolvimos hace rato, en el grupo se habla: del vallenato clásico tradicional y del nuevo vallenato. Los cubanos resolvieron su asunto entre ellos, cuando el poeta cantor Silvio Rodríguez les planteó el pequeño problemita de cantar con una forma distinta a la tradicional manejando un alto sentido en la lírica y exquisitamente musical, simplemente a esa genialidad la llamaron: La Nueva Trova Cubana. DESCARGA DOCUMENTO COMPLETO EN PDF: Crítica a Félix Carrillo Hinojosa

Excelente defensa ante lo que cualquier conocedor del tema llamaria…todo tiene su tiempo…..estoy en total acuerdo de tu brillante intervencion rosendo…se hace necesario que los generos vayan sufriendo una transformacion progresiva en su estructura y en su fisonomia, pues la ley de la vida nos enseña que el ser que no se adapte a los cambios de la naturaleza será extinto sin misericordia, y nuestro genero musical no esta salvo de ese riesgo, esas nuevas idea ventilan y renuevan los aires y los colocan en el escenario de la modernidad y garantizan con ellos su permanencia y vigencia en el corazon y la mente de los pueblos contemporaneos. Solo hay que velar por que la escencia de lo natural no sufra mutaciones deformativas que degeneren las raices y lo puro de nuestro folklore, si no que se basen en lo tradicional y bueno para que este sea su vehiculo de transporte, y lo suba a la cima de la perpetuidad y la permanencia.
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que el vallenato evolucione y cambie eso es muy normal,lo malo es que yo cambie mi forma de tocar y evolucione,palabras sabias de el maestro de maestros gilberto alejandro durán díaz
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El vallenato, por su caracter eminentemente periodistico en su mas pura escencia, ha estedo sujeto a cambios en un principio imperseptibles, se pasó lentamente de la objetividad del tema a la sujetividad del compositor, pero estos cambios siempre fueron acompañados de una base inamibible, que identificaba como huella dactilar el folclore Vallenato en sus distintos aires, lo preocupante por no decir algo mas contundente, es que de aquello casi nada queda, nuevos instrumentos llegaron para apoderarse de la base del Vallenato, se cambió la forma del canto, la forma de componer, se produce por encargo y esto es grave, sino la placa cepulcral de lo que tanto amamos. El nacimiento del Vallenato lirico, con Gustavo Gutierrez y sus alumnos aventajados como Rosendo, fueron moderados tratando con respeto la esencia misma del folclore, sin abusos y conservando grandemente los principios rectores creados por sus antecesores, por ello este cambio fue enriquecedor y no tan dañino como el que estamos viviendo, afortunadamente existimos personas amantes y cultores del Vallenato, que nunca ponemos una emisora ni vemos Tv con su carga de aculturamientos, sino que en la intimidad de nuestros hogares, diseñamos las programaciones que se escuchan en familia, para darle a nuestros hijos la oportunidad de conocer algo distinto, de los que los medios venden como Vallenato. Eso es otra cosa, y no presisamente mala en calidad, pero al fin y al cabo otra cosa.
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CREO FIRMEMENTE EN LAS APRECIACIONES DE ARGUMENTOS SOLIDOS QUE HACE EL MAESTRO ROSENDO ROMERO…Y LAS DEFIENDO. SIEMPRE HE CONSIDERADO QUE HAY QUE BEBER DEL AGUA DE LA FUENTE, CUIDANDO CELOSAMENTE QUE ESTA NO PIERDA SU FRESCURA NATURAL…EXITOS CON ESTA INTERESANTE PROPUESTA PARA LA UNESCO…EL VALLENATO ES EL SER, PENSAR Y SENTIR DE LOS MACONDIANOS POBLADOS CARIBEÑOS DONDE NACIO,AL IGUAL QUE EL PORRO, LA CUMBIA Y EL FANDANGO…
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Cuando estaba leyendo el escrito, pencé en en la posibilidad de hacer un breve aporte, pero ahora solo tengo que manifestar la inconformidad por no tener nada que decir, ya que Chendo lo ha dicho todo. Mís sentimientos de admiración y respeto por usted Viejo Chendo.
Ismael Rudas.
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Cómo superar al maestro? Esta pregunta que podría tener una respuesta sencilla o compleja, según el contexto y el ego de quien la formule, pone de presente una vieja controversia entre el alumno y el profesor.
Si la premisa es superar al maestro para ser mejor que él, entonces hay que comenzar por asumir una actitud respetuosa, de discípulo respecto de su maestro. Para ser un buen maestro, hay que ser ante todo un buen alumno y para que el verdadero propósito de la enseñanza se logre, superar al maestro significa reconocerlo, valorarlo y dignificarlo para seguir sus pasos. He aquí el punto clave. En la medida que reconocemos y valoramos la grandeza del maestro, nuestros pasos serán firmes y capaces de transitar por los caminos que nos llevarán a la fuente del saber. Maestro Rosendo, siga así, sin tanto aspavientos, sentando buena cátedra. Cierro mi comentario con esta cita de Maruja Torres: “El buen maestro hace que el mal estudiante se convierta en bueno y el buen estudiante en superior”.
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