Guatemala, 6 jul (PL) Un centro de conservación e investigación del patrimonio cultural de la civilización maya será inaugurado hoy en el Parque Nacional Tikal, en el norteño departamento guatemalteco de Petén.

Allí, en plena selva, está ubicado uno de los sitios arqueológicos más importantes de esa milenaria civilización, declarado en 1979 Patrimonio Cultural y Natural de la Humanidad por la Unesco.

El Centro es el resultado de un esfuerzo conjunto entre el Ministerio de Cultura y Deportes de Guatemala y el Gobierno de Japón, con un financiamiento importante mediante su Agencia de Cooperación Internacional.

La instalación contará con un laboratorio para el mantenimiento de las piezas, una bodega, un centro de documentación y una sala de exhibición, ésta con las condiciones necesarias para el resguardo de piezas arqueológicas.

Estas no serán solo de Tikal, sino también de otros sitios del país con similares características, y actualmente se poseen alrededor de 50 piezas, en su mayoría de cerámica y estuco.

También se pretende con esa instalación fortalecer la unidad técnica del Parque mediante el aprovechamiento del equipo que permite desarrollar adecuadamente programas de investigación y conservación.

Se busca, además, fortalecer las actividades de educación y divulgación de la cultura maya, según la viceministra de Patrimonio Cultural, Rosa María Chan.

Dicho Centro contará con espacios interactivos donde los visitantes podrán experimentar de forma vívida, y en tiempo real, el proceso que conlleva una pieza arqueológica desde ser excavada hasta llevarla a su exhibición.

El Parque Nacional Tikal, situado en el corazón de la selva petenera y con 57 mil 583 hectáreas, fue creado el 26 de mayo de 1955 y desde 1990 forma parte de la red mundial de reservas de la biosfera.

Su principal atracción turística es la antigua ciudad de Tikal, la más grande de las de esa civilización en el periodo clásico, con un sitio arqueológico que ocupa mil 600 hectáreas.

Tikal fue la capital de un Estado beligerante convertido en uno de los reinos más poderosos de los antiguos mayas, de acuerdo con literatura especializada.

Alcanzó su apogeo durante el período clásico, de 200 a 900 d. C. cuando dominó gran parte de la región maya en los ámbitos político, económico y militar.