1a-_flores_para_gabo_en_el_claustro_la_mercedEL NOBEL en cartagena. La imagen es del patio central del claustro que escogió la familia del Nobel en una de las acciones póstumas que vinculan la memoria del escritor con la ciudad. El pasado mes de julio donaron más de 300 libros de la biblioteca personal del escritor al proyecto ‘La carreta literaria’, del gestor cultural Martín Murillo; y también un árbol de macondo, en cuyo nombre se inspiró para dar vida al pueblo que recrea en ‘Cien años de soledad’. Fue trasladado desde su residencia al parque Espíritu del Manglar.

POR: VICENTE ARCIERI Y DÁLIDA OROZCO
Nuestra Señora de La Merced es el nombre de la edificación, de más de 400 años, escogida por la familia del Nobel para trasladar sus restos.
Quizá una nube de mariposas y una alfombra de flores amarillas llenen, a partir del 12 de diciembre, el patio del antiguo claustro Nuestra Señora de La Merced (1619), sitio escogido por Mercedes Barcha y sus dos hijos, Rodrigo y Gonzalo, para que reposen, en un pedestal de bronce donado por la artista británica Katie Murray, las cenizas del Nobel de Literatura Gabriel García Márquez, fallecido en 2014.

El claustro ESTÁ a unos quinientos metros de la casa en donde el escritor vivió por temporadas; diagonal al mar Caribe y al lado del Teatro Adolfo Mejía, donde se celebra el Hay Festival, que tanto apoyó el literato. El lugar es hoy es la sede de posgrados de la Universidad de Cartagena, institución donde García Márquez realizó estudios de Derecho.

La noticia del traslado. Fue Juan Carlos Gossaín quien dio la buena nueva. “El Gobernador del departamento de Bolívar informa a la opinión pública que las cenizas del escritor colombiano Gabriel García Márquez reposarán en la ciudad de Cartagena de Indias”, escribió.

Dijo que la familia de Gabriel García Márquez, su esposa Mercedes Barcha y sus hijos Rodrigo y Gonzalo, “tomaron esta decisión que ha sido acogida con profunda emoción por ESTAGobernación”.

El anuncio tomó por sorpresa a todos. Incluso seis horas después de haberse difundido, decanos y alumnos aún no sabían que, desde diciembre, los restos del Nobel reposarán en el viejo convento colonial. La edificación seguramente dejará atrás sus tardes meditabundas y soportará la llegada en romería de los seguidores del novelista que creó a Macondo y sus personajes míticos.

Gabo y Cartagena. El Nobel llegó a esta ciudad a principios de 1948 e ingresó a la Universidad de Cartagena para continuar con sus estudios de Derecho. Allí, como lo recuerda el periodista y escritor Juan Gossaín, dirigió el periódico universitario. Luego se vinculó al entonces recién fundado diario El Universal.

García Márquez en vida caminaba plácidamente por las callejuelas y saludaba a los taxistas y cocheros. Muchas veces se iba a donde ellos para escuchar sus cuentos narrados en voz alta, porque estos creían que las olas del mar no lo dejaban oír.

“Aquí siempre tuvo un lugar para llegar y visitar a sus padres, hermanos y amigos. En la Calle del Curato estableció una de sus residencias donde pasaba largas temporadas. También en Cartagena estableció la sede de la fundación que creó para el fomento del periodismo en el contexto iberoamericano”, escribió el gobernador Gossaín.

Jaime Abello Banfi, uno de sus más entrañables amigos y a quien le confió hace veinte años la dirección de su Fundación Nuevo Periodismo, dijo que esta decisión es coherente con la vida y el sentir del Premio Nobel.

“Cartagena es la ciudad que le sirvió a Gabo como escenario de varias de sus novelas, en la que construyó su casa, donde inició su carrera periodística, la que eligió como sede de su fundación. La misma ciudad donde vivieron y están enterrados sus padres y varios miembros de su familia”, explicó.

Precisó que la elección de la Universidad de Cartagena como escenario donde reposarán los restos de García Márquez no fue un simple capricho. “La llegada de las cenizas a un espacio público, de libre acceso a los cartageneros y los visitantes, como es el Claustro de La Merced, no solo reafirma el profundo amor y cercanía que Gabo y su familia han sentido por nuestra ciudad, sino la importancia simbólica que tiene como territorio principal de su legado”, agregó.

Dijo que Cartagena tiene que asumir la relación con Gabo “como un factor social, cultural y turístico”. Y agregó que hay mucho por hacer en este sentido.

El periodista y también escritor Juan Gossaín aseguró que este es un acto de justicia con Cartagena, la ciudad de los primeros y los últimos años de García Márquez.

“Gabo no solo estudió en la Universidad de Cartagena, sino que en este lugar tuvo su primer acercamiento con el periodismo, pues allí dirigió el periódico universitario. Era una institución que él admiraba mucho porque es un centro de profundo respeto e investigación”, expresó.

Sin embargo, el periodista dejó sentir su preocupación porque este lugar se convierta en una simple atracción de la Cartagena turística.

“No es un lugar para ir a tomarse fotos nada más. Es un lugar de respeto hacia la cultura y hacia el legado de Gabo, que debe promover más acciones en este sentido”, precisó.

Entre tanto, Zully Salazar, presidenta de la Corporación Turismo Cartagena de Indias, confió en que la decisión de traer las cenizas del Nobel a Cartagena hará de la ciudad un sitio de peregrinación de intelectuales, escritores, lectores y admiradores del escritor.

Señaló que junto con otros emblemas de Gabo en Cartagena, tales como la casa donde vivió en su juventud y la casa que construyó en su madurez, así como los escenarios de muchos de sus cuentos y novelas, la “ruta turística de Gabo en la ciudad se verá reforzada por el sitio de honor donde reposarán sus cenizas, recordándole al mundo que este colombiano ilustre seguirá brillando a través de los siglos”.