VILLANUEVA, CUNA DE ACORDEONES

POR: ANTONIO LUIS DE MOYA F.*

El municipio de Villanueva, cuyo verdadero nombre es Santo Tomás de Villanueva, se encuentra ubicado en el sur del departamento de la Guajira, bañado por el rio Villanueva, y limita con los municipios de Urumita, San Juan del Cesar, y El Molino.

Villanueva huele a acordeón, a caja, a guacharaca, y ha sido musa de inspiración de muchas canciones vallenatas, entre otras “La Ceiba de Villanueva” “El Villanuevero” “Villanueva mía” “El Cantor de Villanueva” y ha parido importantes interpretes de nuestra música vallenata como la dinastía de los Zuleta, los Romero, los Fernández, los Maestre, y muchos más.

Todos los años se celebra en este municipio de la Guajira el Festival Cuna de acordeones, en la tarima Escolástico Romero (padre de los músicos Israel, Rosendo, Norberto, Límedes, y Rafael Romero Ospino), ubicada en la plaza principal del municipio, este año se realizó la edición 47 entre el 17 y el 20 de septiembre, y se le rindió homenaje al cantante Peter Manjarrez, y al empresario Villanuevero radicado en Barranquilla Ramón Dávila Martinez, gerente general de Gases del Caribe.

Monumento en homenaje a los instrumentos típicos vallenatos ubicados en Villanueva (Guajira)

A lo largo de la historia del festival se han coronado reyes, reconocidos acordeoneros como, Alvarito López, Juancho Rois, Alberto “Beto” Rada, Orangel “El Pangue” Maestre, Julian Rojas, y en el año 2024 ganó Edgardo Bolaños, nieto del famoso juglar “Chico” Bolaños.

En el festival Cuna de acordeones los concursantes deben ejecutar los cuatro aires tradicionales del vallenato, paseo, merengue, puya, y son, pero a diferencia del festival vallenato de Valledupar, en Villanueva se incluyó el aire de romanza, como un quinto aire, que algunos también llaman paseo lírico.

La Romanza se puede describir como un aire vallenato, derivado del paseo, son melodías de ritmo lento, con letras muy románticas cargadas de mucho sentimiento (que se diferencia del vallenato “llorón que gusta mucho en el interior del país) y que ha sido liderado y defendido por compositores como, Gustavo Gutierrez, Fredy Molina, Octavio Daza, y el mismo Rosendo Romero.

Este quinto aire siempre ha encontrado resistencia en los seguidores del vallenato tradicional, sin embargo me comenta Lucho Martinez, más conocido como el “Señor Marbar” que no hay mejor forma de conquistar a una mujer que dedicarle un vallenato bien romántico como, “Llegaste a mi” “Los novios” “La consentida” “Lo más bonito” “Obsesión” “La entrega” “Momentos de amor” y muchísimas más….

En el año 2025 en el festival Cuna de acordeones el ganador en la categoría profesional fue Jorge Alonso Vergel Vargas, quien estuvo respaldado en la guacharaca por Guzmaldo Kammerer y en la caja por James Alvarez, y en el canto Efraín Díaz, quienes habían acompañado al rey anterior Edgardo Bolaños.

Jorge Vergel, nació en Ocaña, Norte de Santander, es un acordeonero festivalero que ha participado en muchos festivales, incluso en los dos últimos años ha sido semifinalista en el festival vallenato de Valledupar; Profesionalmente ha sido acordeonero del grupo “La gente del Cacique” y ha acompañado a reconocidos cantantes como, “Toba” Zuleta, Jorge Oñate, Iván Villazón, entre otros.

Vale la pena anotar que su padre es Jorge Vergel Sabogal quien también es acordeonero, estudió música en la Universidad del Atlántico, y se dedica a formar a jóvenes en la ejecución del acordeón en el municipio de Ocaña.

El triunfo de un acordeonero Ocañero en el festival Cuna de acordeones de Villanueva no es casualidad, ya que en los Santanderes gusta mucho la música vallenata, y de esta región han surgido acordeoneros destacados como Crisanto Rangel, de Ocaña, Ramiro Colmenares de Bucaramanga, quien fue acordeonero de los Embajadores Vallenatos, Victor “Rey” Reyes, oriundo de Barrancabermeja, y compañero de fórmula en varias grabaciones de Miguel Morales.

Para destacar el segundo lugar en el concurso de acordeonero profesional logrado por Arismalder Loperena Vega, quien ya ha participado en varios festivales y pertenece al Resguardo de los Kogui Malayo Arhuaco, ubicados en las estribaciones de la Sierra nevada de Santa Marta.

Por su aporte a la cultura de la región y del país, el festival Cuna de acordeones fue declarado en el año 2006 Patrimonio Cultural y Artístico de la nación.