«Una cosa buena acerca de la música, cuando te golpea, no sientes ningún dolor».: Bob Marley (músico, cantante y compositor jamaiquino).
Por: Ramiro Elías Álvarez Mercado
Hay quienes piensan que la música los traslada a lugares y pensamientos inigualables e inimaginables, les hace sentir que hay vida después de la la vida y más.
» No es buen músico aquel que simplemente se concreta en tocar bien, es mejor aún aquel que puede compartir con nosotros lo que sabe»: Israel G. Noriega «El Liras» (músico, poeta, compositor, arreglista, guitarrista y profesor de música mexicana).
Por: Ramiro Elías Álvarez Mercado.
Cuando sentimos que las simples palabras no alcanzan, recurrimos a las canciones. Entonces les dejamos a ellas el encargo de decir aquello que nosotros, por torpeza, timidez o cobardía no podemos. Esta práctica es tan antigua como el amor mismo, es precisamente el caso de esta canción enmarcada en el paseo lírico-romantico de la autoría del escritor, investigador y folclorista cordobés Bernardo José Rivero Ramos. Un bellísimo canto que pareciera hecho especialmente para dedicar a una mujer amada después de una discusión sin trascendencia.
Bernardo José Rivero Ramos
Tiene un pega-pega suavecito, sutil y tierno como son esos amores que en algún momento hemos sentido. Es un poema que escapa del dogal del octosilabo y pasa a ser un verso mayor, es una canción que lo tiene todo: la parte instrumental genera una emoción estética; es decir, que la música como expresión del arte y también de la belleza, tiene por objetivo suscitar diversas sensaciones que pueden ser expresadas, comunicadas, activadas, experimentadas y compartidas.
Unos arreglos melódicos maravillosos, exquisitos con una guitarra que se escucha sublime, celestial, suave y sutil, instrumento que ocupa un puesto preferencial en la carrera artística del músico, compositor y cantante encargado de la ejecución en esta pieza musical Julio César Mejía Miranda por su versatilidad, es de esos guitarristas que consideran su «Madera Bendita», como tituló el Dr Adrián Pablo Villamizar Zapata a su instrumento a quien inmortalizó en una de sus composiciones, es como si fuera una extensión más de su cuerpo.
Julio César Mejía Miranda
Una ejecución que va muy acorde con su voz cantarina, suave, agradable y nostálgica que le dan ese toque romántico y tierno a la vez. Complementado perfectamente con el coqueteo constante de ese saxofón juguetón que le imprime alta clase a la melodía dándole un toque mágico y un final fantástico.
Lo que me confirma que cuando un canto vallenato surge de lo más profundo del autor que ha vivido y sentido la historia y luego quiere transmitir, tiene los ingredientes melódicos y poéticos que calan con facilidad en los corazones de quienes la escuchan.
Todos, en mayor o menor medida, vivimos con la música. Por eso las buenas canciones nos provocan distintos sentimientos cuando llegan a nuestros oídos.
COSAS
Título: Cosas Autor: Bernardo José Rivero Ramos Voz y Guitarra: Julio César Mejía Miranda Aire Musical: paseo vallenato lírico-romantico Grabado en: Star Música
» La música es el vino que llena la copa del silencio»: Robert Fripp (músico, compositor y productor británico).
Por: Ramiro Elías Álvarez Mercado
El amor, la admiración y el respeto, son tres de los grandes sentimientos que inspiran las mejores canciones de homenajes. Como esta titulada ‘Recordando al Ruiseñor’, un bellísimo y sentido homenaje que el maestro Joaquín Rodríguez Martínez, «El Poeta del Sinú» le rinde al «Eterno Cantante de La Música Vallenata» como lo denominé en una crónica que le dediqué hace algún tiempo; me refiero a Jorge Antonio Oñate González, esa gran voz que nos deleitó por más de cinco décadas y que lo seguirá haciendo por la eternidad, de igual manera como lo hace esa ave canora del cual tomaron su apelativo de «El Ruiseñor del Cesar»: pájaro que se caracteriza por tener un gorgeo agudo y prolongado, con cambios de tonos, alegres, melodiosos, sonoros, afinados y potentes que resultan celestiales y agradables para el oído, algo que se puede percibir cuando escuchamos la voz del cantor de La Paz (Cesar) en sus magistrales interpretaciones.
«La música es la literatura del corazón, que comienza donde terminan las palabras». Alphonse de Lamartime (compositor, poeta e historiador francés).
Por: Ramiro Elías Álvarez Mercado
Pocas cosas son tan precisas como la interpretación de una obra musical por un buen cantante. Vocalización exacta y rigurosa que dan lugar a un agradable canto que suele llegar directamente al alma. La música tiene todo tipo de efectos en el ser humano: nos alegra, nos entristece, nos activa, nos hace bailar, nos emociona… Ha acompañado a la humanidad desde sus primeros días, cuando aprendimos a utilizar sonidos y cánticos para comunicarnos entre nosotros o con las fuerzas superiores que regían nuestras vidas y que han evolucionado según lo hacía la sociedad.
«La música es el arte más directo, entra por el oído y va al corazón»: Magdalena Martínez (flautista española).
Por: Ramiro Elías Álvarez Mercado.
El arte de escribir canciones está en transmitir sentimientos e impresiones positivas con la palabra y llegar de manera agradable a la gente. La armonía, la melodía y el ambiente donde fue concebida una canción es algo que el compositor vive y siente y luego pretende trasladar.
Valledupar es la ciudad musa de los cantores, su nombre se siente en el aire, en la magia del río y en la belleza del paisaje. La fascinación del canto cautiva a los visitantes.
JOSÉ ATUESTA MINDIOLA
Valledupar es la ciudad musa de los cantores, su nombre se siente en el aire, en la magia del río y en la belleza del paisaje. La fascinación del canto cautiva a los visitantes.