El CSJ, tras dos días adicionales de deliberaciones, mantuvo la destitución contra el alcalde de Bogotá.
La decisión, que estaba ‘cocinada’ desde el martes pasado, había sido aplazada en dos ocasiones por cuenta de la solicitud de última hora del magistrado Ovidio Claros, quien pidió más tiempo para estudiar dos memorandos que solicitaban, en plata blanca, analizar de fondo el tema de las tutelas a la luz de la Convención Interamericana de Derechos Humanos.
El magistrado Pedro Sanabria ponente de la decisión manifestó que con el fallo “queda en firme el fallo de la Procuraduría contra el alcalde Gustavo Petro”. Argumentó que “los derechos políticos de los ciudadanos tienen un límite, por lo cual en este caso nunca se vulneraron ni se pusieron en riesgo con la decisión administrativa”.
“La Procuraduría, con la sanción impuesta a Gustavo Petro, no les ha vulnerado los derechos a los accionantes aducidos en las demandas de tutela, como tampoco los de otra naturaleza, así cada ciudadano tenga la libertad para aducirlos”, señala el texto de la ponencia de Sanabria.
¿Qué opciones tiene todavía el alcalde de Bogotá? Si bien la decisión de este jueves puede ser revisada por la Corte Constitucional, a Petro aún le quedan aún 23 tutelas que hacen trámite en el Consejo de Estado y -la que aún se ve lejana- esperar por las medidas cautelares solicitadas a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.