
Los lugareños no se acercaban porque según una leyenda le tenían temor a la sirena que vivía allí. Nadie se atrevía a subir.
Cuenta Román que, cuando niño, la quietud de la noche amazónica peruana era interrumpida por el barullo de Gocta, una catarata a la que no se acercaban por temor a la sirena que, según la leyenda, allí vivía. Seguir leyendo «Gocta, la catarata que no dejaba dormir, es el sueño de ecoturistas en Perú»